Nosotros
Un lugar donde se escucha el silencio, donde sentirás lo que posiblemente hemos olvidado, donde relajarte… Un capricho a las puertas del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
Mis padres, Nieves y Manel, tuvieron en su día un “Capricho”, una casa rural con una larga historia familiar en la que reina el silencio y donde nuestros clientes pueden relajarse después de realizar sus excursiones por nuestro Pirineo.
Actualmente es un orgullo hacerme cargo de este fabuloso proyecto.
Marc
Un Lugar donde se escucha el silencio
Casa Turmo, que así llaman en Laspuña a nuestra casa, es una casa del patrimonio familiar desde, no se sabe con exactitud pero posiblemente desde el siglo XV o XVI. Ha sido siempre propiedad de nuestra familia y en ella nació mi madre, Nieves Castillo que junto a mi padre Manel, restauraron la casa para hacerla de capricho: «El Capricho de Nieves» y que actualmente tengo el honor de regentar.
Es un lugar con energías positivas que te aporta paz, calma y tranquilidad. Rodeada de vistas maravillosas hacia el Parque Nacional de Ordesa, Monte Perdido, nuestra querida y apreciada Peña Montañesa, sin olvidar la majestuosidad del río Cinca que riega nuestro valle y que fue medio de vida y de transporte para nuestros padres y abuelos que trasportaban la madera en las Nabatas hasta Tarragona, surcando aguas peligrosas que muchos dejaron su vida en ellas.
Es un lugar para descubrirlo, vivir lo y escucharlo. Ven con tu pareja y disfrútalo, será para nosotros un placer compartir con vosotros unos días en «El Capricho de la Nieves». Contamos con dos habitaciones con baño individual cada una, al lado de una sala con magnificas vistas donde tendréis a vuestro servicio, nevera, TV, cafetera, calienta aguas, microondas y unas maravillosas vistas a la Peña Montañesa y al Parque Nacional
«El Capricho de Nieves» además de nacer mi madre y vivir su infancia en ella. Es una casa en un pueblo con muchos recuerdos familiares.